Faena antológica de Morante, otra más, y corta un rabo en Salamanca
El de La Puebla sale por la Puerta Grande junto a Marco Pérez, que logra dos orejas en su primera corrida en España
Morante: un año y un día después

Ficha de la corrida
Mano a mano en la plaza de la glorieta de salamanca
GANADERÍA: Se lidiaron toros de Ventana del Puerto, el primero, corretón; Garcigrande, el segundo áspero; de Hermanos García Jiménez, el tercero, rebrincado; mientras el de Puerto de San Lorenzo, cuarto, fue manejable pero sin recorrido; el quinto, de Garcigrande con clase excelente premiado con la vuelta al ruedo; el sexto, de Hermanos García Jiménez, embistió con profundidad y repetición.
MATADORES: Morante de la Puebla (de turquesa y pasamanería blanca): tres pinchazos y bajonazo (ovación); pinchazo y estocada habilidosa (silencio) y estocada trasera y desprendida (dos orejas y rabo). Marco Pérez (de lila y oro): estocada que hace guardia, dos pinchazos y estocada (palmas); tres pinchazos y estocada (silencio); y pinchazo, estocada y un descabello (dos orejas tras aviso).
INCIDENCIAS: Actuó de sobresaliente Salvador Ruano. Se registró casi un lleno en los tendidos en tarde de temperatura veraniega
Morante de la Puebla cortó un rabo ayer en La Glorieta, en Salamanca, y salió a hombros junto a Marco Pérez, que obtuvo dos orejas. Pero quien marcó diferencias, absolutamente, fue el torero sevillano, que ya al abrir plaza dejó un manojo de verónicas de muchos quilates tras el recibo con una larga a un toro corretón de Ventana del Puerto; preciosa la media de broche. Tras el brindis al Viti, Morante firmó una bella faena en un palmo de terreno, en el tercio, planta hundida y hombros descolgados, a cámara lenta por ambos pitones, aprovechando la nobleza del astado. La espada lo desdibujó todo.
Al tercero le inició faena Morante por alto con ayudados a un toro rebrincado de García Jiménez, al que se quitó de encima con brevedad y habilidad.
Lo verdaderamente grande llegó en el quinto, de Garcigrande, con el que dejó reminiscencias antiguas en el recibo con recortes de rodillas y con el que puso la plaza en pie con el precioso quite por cordobinas. Mantuvo el nivel de entusiasmo, o más, en el último tercio, con una apertura de hinojos por alto antes de cuajar a placer a Repique, un gran toro, con mucho recorrido y clase en su embestida y que acabaría premiado con la vuelta al ruedo.
Toreo excelso del de La Puebla del Río, a cámara lenta, pura naturalidad, armonía y compás. Y para rematar unos originales molinetes a dos manos. Enterró el acero y a sus manos fueron las dos orejas y el rabo con la Glorieta convertida en un auténtico manicomio.
El joven Marco Pérez, por su parte, recibió por delantales al segundo, que también brindó al Viti. El salmantino hizo un esfuerzo con un toro zancudo muy complicado de Garcigrande. Otro esfuerzo hizo con el cuarto. Se atascó con los aceros.
No se quiso quedar atrás Marco con el sexto, toreando muy despacio a la verónica de rodillas. Galleo por tapatías para dejar al toro en suerte. Apertura de rodillas en los medios completando una tanda de siete muletazos en redondo, arrucina incluida, que hizo explosionar de nuevo el ambiente. Se dejó venir en la larga distancia a Despertador, que humilló y repitió por abajo. Trazo largo y mano baja, Marco lo cuajó en una faena maciza y profunda sobre la diestra. También al natural sacó muletazos muy largos.
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